Probando la Mv Agusta Rivale
Publicado: 20 Abr 2015
Buenas, el sábado estuve probando la MV agusta Rivale. Más bien una toma de contacto. Una prueba acelerada de una media hora, mientras tratábamos de seguir a un guía entre semáforos y el tráfico de Barcelona.
La Mv Agusta Rivale es una moto que impresiona por el diseño y antes de subir no sabes exactamente que te vas a encontrar. La primera sensación es que el asiento está muy adelantado, es casi como ir sentado encima del depósito. La ergonomía está entre una naked y una sm. Con un asiento alto, un manillar ancho pero bajo y unas estriberas cómodas.
Salvo el interruptor de los intermitentes, que está ubicado donde debería estar el claxon y viceversa, el resto está en un sitio correcto. El cuadro es bastante pequeño y está muy alejado de la vista, te queda casi entre las piernas. La palanca de embrague cumple sin más, no es muy dura pero en un día de tandas puede acabar siéndolo. El tacto de la bomba de freno cumple, no hace falta apretar mucho pero parecía poco dosificable, la moto frena bien, el mordiente es bueno, tampoco pude ponerla a prueba. Freno trasero bien y el cambio no pude probar el semiautomático que lleva de serie, más por falta de costumbre y tiempo que otra cosa. Los espejos en el manillar son una porquería para el tráfico urbano.
Las suspensiones, posiblemente, sea el punto que más me gustó de la Rivale. Cuando te subes a ella y empujas para comprimir la horquilla puede hacerte pensar que es un poco blanda. No sientes el tacto seco en el culo al subirte, como en una deportiva, pero una vez en marcha te das cuenta que ofrece buena información de lo que estamos pisando y se recupera de los baches de forma rápida y limpia. La sensación del amortiguador trasero es similar, aunque con una prueba de este tipo es difícil sacar mucha información. En general la moto tiene una tarado claramente deportivo pero sin llegar a las brusquedades de una RR, buen compromiso para uso deportivo en carretera aunque para los más ruteros pueda resultar algo rígida, muy muy ágil y con muy pocas inercias.
El motor tiene mucho carácter. Por un lado es muy suave de funcionamiento, aunque tiene unas vibraciones notables en estribos y asiento. El ride by wire da un tacto bueno pero me pareció excesivamente sensible, supongo que es cuestión de acostumbrarse. Saliendo de los semáforos parece una moto eléctrica, suave y con poca fuerza a bajo régimen. A la que empiezas a abrir gas con ganas y empieza a subir de vueltas enseguida pega una patada que sorprende, incluso exagerada para el entorno en el que la probamos. Hay que andarse con ojo abriendo mango porque pasa de empujar como un scooter a empujar casi como una mil y te pide pista libre, le acompaña un sonido de serie muy racing y no es difícil ver despegar la rueda delantera a pesar de ir sentado encima. Todo un subidón de adrenalina.
Al probar la Rivale me encuentro con algunas sensaciones enfrentadas. Quiero creer que estoy muy mal acostumbrado al empuje progresivo del bicilíndrico. Ahora mismo no sabría decir si el motor es una pasada o es una mierda. Tengo claro que intentar correr entre coches con un motor así es horrible. No sé como de dosificable podría llegar a ser con la práctica y el uso en carretera o circuito. En otras pruebas he leído que su motor es elástico, una de dos, o no sé correr con este tipo de motores en los que debes tener un ojo en el cuenta rpm, o debo tener un concepto equivocado de un motor elástico. Lo que no se puede negar de esta MV agusta es que es una moto muy divertida y emocionante. Con una parte ciclo de primera y una estética impactante. No es muy versátil, por su tanque pequeño, protección aerodinámica y escasa capacidad de carga, esto habría que comprobarlo en su versión stradale. Una moto para tomarla como un chute de adrenalina en las salidas de domingo.
